19 de marzo de 2015

La Respiración Abdominal

Por carlota elena guerrero 
De acuerdo a la forma en que los pulmones se llenan de aire podemos dividir la respiración en tres tipos: Clavicular, Torácica y Abdominal.

Se llama respiración Clavicular cuando el aire inhalado solo alcanza a llenar la parte más alta de los pulmones. Esto se refleja en una elevación de las clavículas al inhalar y es típica en las mujeres que por razones sociales desean mantener el abdomen tenso. Esta respiración es muy superficial e indica que los pulmones no están renovando suficientemente el aire inhalado.
La respiración Torácica se realiza cuando el aire logra llenar las 2/3 partes de los pulmones pero aún no llega a renovar todo el aire almacenado en los pulmones. Esta respiración se hace visible cuando la caja torácica se eleva al inhalar. Es característica de los hombres que desean mostrar los pectorales.

La respiración Abdominal se consigue llevando el aire hasta la parte más baja de los pulmones. Esto se logra cuando al inhalar permitimos que el diafragma descienda empujando el abdomen. Se podrá observar que al inhalar el abdomen se eleva y al exhalar desciende. Esta es la mejor de las tres respiraciones descritas puesto que logra renovar el aire acumulado en la parte más baja de los pulmones.
Es la respiración que realizan los niños naturalmente.
Son innumerables los beneficios que se obtienen de la respiración abdominal. El renovar todo el contenido de aire de los pulmones permite una mejor oxigenación de las células, gracias a lo cual mejoran las funciones metabólicas y fisiológicas del cuerpo, el cerebro se oxigena y la mente tiene un mejor rendimiento en todas sus facultades. El cuerpo se relaja, la mente se calma.
Para conseguir los más altos beneficios de la respiración abdominal, antes de cada inhalación debemos practicar una exhalación profunda que permita que salga de los pulmones la mayor cantidad de aire viciado. Así, los pulmones estarán en mejores condiciones de recibir mayor cantidad de aire fresco.